Es posible que la infección en la garganta y la boca pueden haber sido tan grave que los 42 pies de largo y 7 toneladas del dinosaurio murieran de hambre, dice Wolff, un paleontólogo de vertebrados y un estudiante de tercer año en la Universidad de Wisconsin-Madison, Escuela de Medicina Veterinaria. Co-autores del estudio incluyen el famoso paleontólogo John R. Horner, del Museo de las Rocosas, que financió el estudio, y David J. Varricchio de Montana State University.
El enfoque del nuevo estudio no solo se basó en el estudio de las lesiones en las mandíbulas de Sue sino además de otras nueve muestras de tiranosaurio. Las lesiones habían sido atribuidos a morder las heridas o, posiblemente, una infección bacteriana.
«Lo que me llamó la atenciónsobre la tricomonosis como un candidato potencial para este tipo de lesiones misteriosas en las fauces de tiranosaurios es la manifestación de los efectos de la enfermedad en las aves de rapiña», explica Wolff. «Cuando empezamos a mirar la tricomonosis en mayor profundidad, no había una historia que coincidían con algunas líneas de pruebas para la transmisión de la enfermedad en tiranosaurios».
En las aves, la tricomonosis es causada por un protozoo parásito llamado Trichomonas gallinae. Puede transmitirse de las aves como las palomas, que comúnmente portan el parásito, pero a menudo sufren de pocos efectos negativos, a las rapaces como los halcones, donde causa lesiones graves en las mandíbulas. El patrón de las lesiones coincide con los agujeros en las fauces de los tiranosaurios y además se producen en la misma localización anatómica.
Los Tiranosaurios se saben que eran gregarios, se mezclaban luchando entre sí y, a veces, se comían unos a otros. Por lo tanto la transmisión del parásito puede haber sido a través del contacto salival o del canibalismo, señalando además que no hay evidencia conocida de tricomonosis en otros dinosaurios.
«Esto nos lleva a sospechar que los tiranosaurios podría haber sido la fuente de la enfermedad y su transmisión en su entorno», dice Wolff.
Para que la enfermedad se manifiestara en las mandíbulas de Sue y otros tiranosaurios, tendría que haber sido en una etapa muy avanzada donde el parásito establece una biopelícula en la parte posterior de la garganta.
«Las lesiones que observamos en Sue sugieren una fase muy avanzada de la enfermedad e incluso pueden haber sido la causa de su muerte», dice Wolff. «Es una posibilidad distinta, ya que las lesiones pueden haber dificutado la alimentación no importa cuán poderoso seas».
Referencia:
Wolff EDS, Salisbury SW, Horner JR, Varricchio DJ, 2009 Common Avian Infection Plagued the Tyrant Dinosaurs. PLoS ONE 4(9): e7288. doi:10.1371/journal.pone.0007288
es muy interesante es gran nuevo descubrimiento en especial porque asi como este habra muchos mas y asi poco a poco se prodra explicar de una manera acertada la extincion de los dinosaurios ademas de que se sabra mucho mas de su forma de vida.